A horas de su eliminatoria en Europa League contra el Manchester United, el Fútbol Club Barcelona se ve envuelto en un nuevo escándalo. La Fiscalía de Barcelona investiga al club por supuesto delito de corrupción entre particulares y va tras la pista del pago de 1.4 millones de euros de la entidad blaugrana a la empresa DASNIL 95, que es presidida por José María Enríquez Negreira, ex árbitro y vicepresidente del Cómite Técnico de Arbitros entre 1994 y 2018.

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Esta investigación es otra herencia que deja la gestión de Josep María Bartomeu. Sin embargo, el expresidente del club alega que estos informes existen desde 2003, lo cual involucra hasta 3 juntas directivas distintas a la suya. Además adiciona que estos pagos se dejaron de realizar por un recorte de presupuesto. Esta información, la suelta la Cadena SER, a través de su programa “Qué t’hi jugues”.

Xavi pasó de dar declaraciones extra futbolísticas previo a su partido contra el Manchester United.

El monto mencionado se abonó en tres pagos, 532.728,02 euros en el año 2016, 541.752 euros en 2017 y 318.200 euros en el año 2018. Curiosamente, la fecha del último pago coincide con la salida de José María Enríquez Negreira del CTA.

En declaraciones de Enriquez Negreira, el ex árbitro aseguró que estos pagos se le hacían por “asesoramiento técnico”. La principal razón detrás de la solicitud de este servicio era cerciorarse de que “no se tomaban decisiones en su contra”. Lamentablemente para los implicados, no existe documentación que certifique que esto era así, a lo que una de las partes responde que es porque el asesoramiento se daba verbalmente.

La respuesta del FC Barcelona ante el escándalo arbitral

A través de las redes sociales del club, el actual presidente de la junta directiva Joan Laporta se pronunció al respecto. “En el pasado se contrataron los servicios de un consultor técnico externo, quien suministraba informes técnicos referidos a jugadores de categorías inferiores.. Adicionalmente, la relación con el propio proveedor externo se amplió con informes técnicos relacionados con el arbitraje profesional a fin de complementar información requerida por el cuerpo técnico del primer equipo y del filial, una práctica habitual en los clubes de fútbol profesionales”, declaró